viernes, 18 de mayo de 2012

La importancia del hombre grande.

Viendo el tercer partido de la serie Miami Heat vs. Indiana Pacers me preguntaba cuan importante es contar en la pintura con un pívot con centímetros, que domine el juego en la defensa y que lo haga también en el ataque bien tomando el mismo la responsabilidad o bien abriendo huecos para que la tomen sus afortunados compañeros. Pero no solo pensé en la importancia que tiene para un equipo su hombre grande en juegos eventuales, sino en el papel que puede desempeñar a la hora de hacerse con el anillo de campeón.

Y la trascendencia que puede tener un hombre grande asusta, no tanto a mí, si no a los fieles seguidores de los Heat que vienen soportando minutos en pista de Pittman, Joel Anthony o Turiaf. Y lo peor, no minutos testimoniales, de los de la basura, sino una cantidad importante de minutos, mucho mas aún con la lesión de Bosh. Para Roy Hibbert esta siendo como un juego de niños, un mini-basket en las mejores canchas del mundo. Pero volvamos al tema principal de este artículo, que es la importancia de los hombres grandes en la consecución de un anillo. A nadie se le escapa que el año pasado, sin Tyson Chandler, Dallas Mavericks  no hubiese llegado tan lejos como donde llego. He aquí la primera clase de pívot, alto, grande, poderoso, con facilidad para rebotear y del que sus compañeros saben que siempre va a estar ahí, molestando un tiro o poniendo un tapón cuando ellos sufran en la marca. Desgraciadamente para Miami no existe en su roster un jugador de su tipo. No solo Roy Hibbert ha estado aprovechándose de la mala defensa de la pintura realizada por Miami, sino que han sido habituales canastas fáciles dentro precedidas por una penetración del exterior. Igual que Tyson Chandler, nombres que me vienen a la cabeza, por ejemplo el de Ben Wallace, jugador defensivo del año en temporadas consecutivas, uno de los pivots mas bajos de la historia pero un autentico guerrero que derrochaba energía en las canchas. Él fue pieza clave no, lo siguiente en el titulo de los Pistons en 2004.

En el otro lado, un grandote mas agresivo, mas dominador pondremos a O´Neal (hay ciertamente muchos ejemplos, simplemente es por elegir uno de los mas recientes). Un jugador que te pueda marcar la diferencia en ataque desde la pintura. Anotar él, hacer que las defensas se cierren y buscar tiros más fáciles para sus compañeros. No tengo duda de que si a Wade se le preguntase con quien tiraba mas cómodo si con O´Neal o con Joel Anthony se quedaba con Shaq, simple cuestión de llamar la atención de las defensas y eso que Big Cactus ya llego algo tocado a Florida. Desgraciadamente para Miami, tampoco hay en la plantilla un jugador de las características de O´Neal, ni tan siquiera parecidas. Y el jugador que podía atraer un poco las defensas con su juego interior, Bosh, no sabemos si será capaz de llegar a participar más en esta serie. Por lo tanto el tiro de Miami sufre (ver porcentaje sin Bosh y con Bosh), los porcentajes bajan, la confianza desaparece y los nervios florecen, buena muestra lo que le sucedió ayer a Wade

Lo que esta claro es que ganar un anillo sin un buen pívot es tarea difícil o casi imposible. Miami sufre la planificación de una plantilla que después de los tres amigos parece un solar. Ver a LeBron jugando de ala-pívot deja aún mas a las claras que, en verano, no se le dio demasiada importancia a la pintura. Y en Playoffs donde todos van a la guerra con el cuchillo entre los dientes para matar al rival necesitas a alguien que, o bien te aparte a los guerrilleros o bien sea capaz de dominarlos con su juego de ataque. Pittman, Joel Anthony, Ronny Turiaf, eso es lo que no vale en tiempo de Playoffs.  

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